SEGUNDA VUELTA, PARADOJAS,POSICIONAMIENTOS Y TENDENCIAS: POSIBILIDADES DE LOS CANDIDATOS:

SEGUNDA VUELTA:

PARADOJAS

POSICIONAMIENTOS Y

TENDENCIAS:

El fin del presente  ensayo es pedagógico, explicar los fenómenos políticos en escenarios de caos. Advierto los conceptos de izquierda, derecha, centro, provenientes de la política del pasado, son inútiles para interpretar la política moderna, carecen de contenidos.

1.- LOS RESULTADOS Y LOS POSICIONAMIENTOS:

Respecto al posicionamiento, los candidatos que tenían posicionamientos diminutos, el acto electoral sólo ha servido para certificar o darles su partida de defunción.

Respecto a los candidatos con posicionamientos significativos, (se produjeron cinco aluviones), terminada la primera vuelta, desaparecen los posicionamientos de los candidatos perdedores, dejan de tener posición en la mente de los electores. Culminado el proceso, el elector desaloja de su mente la posición de intención de voto del candidato que queda fuera de competencia, sólo le queda frustración.

De los candidatos que pasan a la segunda, sus posicionamientos son la base para iniciar este tramo final. Keiko Fujimori, con un 22% desde hace tres años, sin sobrepasar ese techo alcanza el 23% (el  tramo final del proceso sólo le dio un punto). Se deduce: ha llegado al límite en su posicionamiento,  Ollanta Humala durante cuatro años su posicionamiento fue de 10 y 12 %, actuando como opositor, en el tramo final logró un aluvión de posicionamiento de 32%, ganando la primera vuelta. También se deduce: ha llegado a un techo en su posicionamiento.

Estamos ante dos candidatos que ya no pueden crecer en posicionamiento, en posición firme de intención de voto. La elección de ese 45% que no voto por ellos va depender de variables psicosociales, teniendo por base las tendencias históricas.

Se puede resolver el enigma del nuevo Presidente del Perú, teniendo en cuenta el nuevo escenario donde se vuelve a suscitar el caos y las paradojas.

2.- POSICIONAMIENTOS Y TENDENCIAS:

Señalé: en la primera vuelta no hubo estrategias. Si se hubiera tenido presente las variables del posicionamiento el proceso hubiera sido una lucha en el subsuelo social, donde se dan los trasvases de los operadores, y los cambios en las posiciones. En su lugar se dio una lucha en la superficie, ficticia, llena de incoherencias, donde los candidatos fueron bailarines, cocineros, cantantes, menos políticos.

La tendencia autoritaria ha impulsado el triunfo de Ollanta y de Keiko, ambos están en la misma tendencia histórica del autoritarismo, el primero su autoritarismo es nacionalista, en el otro es pragmático. Lo que diferencia a uno y otro es la identidad, la tendencia de la identidad en este caso se confunde con la tendencia autoritaria, un Ollanta por su formación militar, haga lo que haga, tiene el sello de esta tendencia,  mientras el autoritarismo de Keiko se sostiene en el pasado, en la dictadura de Alberto Fujimori (un subidito japonés). Ambos estando en la misma tendencia tienen que competir para liderar está tendencia, sin destruir el núcleo autoritario que sostiene su posicionamiento.

En esta segundo vuelta, Ollanta y Keiko, ratifican la ausencia de estrategias. Se está dando incoherencias en relación con sus posicionamientos, ambos candidatos se mimetizan, se disfrazan, pierden identidad. Ollanta parece no ser Ollanta y Keiko parece ser no Keiko, al punto que se vuelven intercambiables. Cada uno proyecta una imagen contradictoria con el núcleo de su posicionamiento, (el autoritarismo pragmático en uno y el autoritarismo nacionalista en el otro), cada uno trata de ser consustancial a la marea democrática de participación, a la ética, a los derechos, a la libertad.

Nos encontramos ante la paradoja de un autoritarismo democrático y participativo, y de un autoritarismo ético y libertario, aparentemente la tendencia autoritaria se va negando al tratar de confundirse y desatar a la marea democrática. Cuando se trata de conciliar tendencias opuestas el efecto es el caos, la incertidumbre, el núcleo duro del posicionamiento de ambos de vuelve incoherente, estamos en un escenario gelatinoso, de contornos contradictorios.

El fujimorista está confundido, no puede creer que la hija niegue al padre, y el seguidor de Ollanta no logra comprender a un Ollanta conciliador en todo. En estas condiciones es necesario comprender las posibilidades de uno y otro, en un análisis de las tendencias.

3.- LA  TENDENCIA AUSENTE:

En escenarios de caos se da la figura de candidatos perdedores poniendo condiciones a los ganadores, lo estamos viendo en el Perú, los perdedores ponen condiciones a los ganadores, como si representarán o fueran líderes de los sectores que votaron por ellos. En la informalidad política del Perú, ninguno representa a los electores, es otra paradoja que surge de la ilusión y de la ficción de una representación legal pero no real, de la vaciedad de contenidos de los partidos.

Otra paradoja: candidatos perdedores autoritarios (lo es Toledo, Castañeda y PPK) convertidos en líderes de la democracia, demandando a los ganadores respeto a una constitución degradada. Esta paradoja se origina de la confusión entre democracia formal y de participación. Al darse esta confusión pueden parecer demócratas a pesar que nunca dieron participación al pueblo.

La tendencia ausente, sin liderazgo y sin candidato, en esta segunda vuelta es la marea de la democracia de participación (unida a la ética). La democracia de participación es la tendencia del mundo moderno, frente al autoritarismo que nos llega del pasado, esta tendencia ha impulsado la caída de la dictadura de Fujimori y el triunfo de Susana Villarán a la alcaldía de Lima, su vacío condiciona las paradojas de la segunda vuelta.

Los candidatos autoritarios ganadores de pronto quieren liderar la marea democrática y los perdedores creen ser ellos los lideres de esta marea. Sin embargo, ni unos ni otros lo representan, su pasado a cada uno lo contradice, el contenido social intuye la contradicción. La contradicción de forma y contenido vuelve a manifestarse, lo formal no coincide con el contenido, detrás de cada candidato ganador está una historia de autoritarismo, lo mismo detrás de cada candidato perdedor. El vació de la tendencia democrática de participación está generando un agujero negro, escenarios de caos, de incertidumbre, donde no es posible pronosticar resultados.

4.- LAS ENCUESTAS

En esta segunda vuelta las encuestas dejan de medir posicionamiento, la intención de voto firme, la única variable que nos permite pronosticar con anticipación el triunfo y la derrota en una contienda electoral.

A estas alturas ya han salido las primeras encuestas, puede parecer que Keiko se acerca a Ollanta. Estos resultados al no medir posicionamientos no reflejan objetivamente la mente de los ciudadanos, y en un escenario de caos por el vacío de la tendencia de la democracia de participación, tampoco expresan en forma clara a las tendencias.

Se puede señalar el resultado de la segunda vuelta teniendo en cuenta la conducta de los operadores. A pesar que Toledo ha prohibido a sus “militantes” hacer campaña en favor o en contra de Ollanta o Keiko, bajo amenaza de expulsión, (otro error de Toledo) los operadores se mueven por impulsos, intereses, sin hacer caso de las “directivas” de sus supuestos caudillos.

Podemos señalar, dada la cercanía del desenlace electoral, va ser difícil un trasvase de operadores de Ollanta a Keiko y viceversa, originando un aluvión que destruya a uno de ellos. También por la cercanía del proceso es difícil que los operadores dejen de hacer campaña a favor de sus líderes.

El problema es el 45% por ciento de ciudadanos que no votaron por ellos. Si tenemos en cuenta las tendencias, a pesar de la confusión se puede deducir que quienes votaron por Toledo, (15% de ciudadanos) van a votar por Ollanta, por estar en la tendencia de identidad. La incertidumbre esta en los ciudadanos que votaron por PPK y Castañeda. Ese 25% va decidirse de acuerdo a sus fobias, en grado e intensidad de su repulsión, “tapándose la nariz”, van a decidir por uno u por otro o por el voto en blanco y viciado.

Si se tiene en cuenta este cálculo Ollanta es ya ganador de la segunda vuelta. Esto no puede reflejarse en las encuestas donde lo único duro es la indecisión del 24%. En los indecisos puede el voto estar oculto tanto para uno y para el otro candidato. Solo un error, un acto de corrupción en tiempo presente, va destruir la posibilidad de uno o de otro. El parecerse demasiado uno y otro candidato, por su mimetización, va favorecer a Keiko no a Ollanta. La diferenciación en base a la afirmación de la tendencia de identidad (que es poderosa) va ser decisiva para el triunfo de Ollanta.  

 

 

 

UNA FRASE PARA LA JORNADA

Todo lo que se come sin necesidad se roba al estómago de los pobres.
Mahatma Gandhi

ARTE COLOR Y FORMA

EROS Y TANATOS 

DEFINIENDO LAS POSIBILIDADES EN EL CAOS Y LA INCERTIDUMBRE DEL PROCESO 2011

 

DEFINIENDO LAS

POSIBILIDADES:

ENCUESTAS,

ALUVIONES,

POSICIONAMIENTOS

Y TENDENCIAS

El presente ensayo es el último sobre el proceso electoral de abril del 2011, útil para comprender fenómenos políticos discontinuos, paradójicos,, donde los actores son juguetes, como en las tragedias griegas, de los intangibles de la política moderna..

Las encuestas son ya parte de la cultura política moderna, suscitan actitudes contradictorias, los políticos agradecen a las encuestas cuando les favorece o se muestran escépticos o incrédulos cuando les es adverso. Estamos ante un fetichismo en torno a las encuestas. Si se hacen en forma adecuada nos están dando la medida, el cuanto, de lo que se mide.

Las encuestas en un proceso electoral político miden el posicionamiento como una correlación directa entre el electorado y un candidato, en términos de intención de voto, para ello, el candidato debe estar en la mente del elector, o en una posición. Si las encuestas miden posicionamiento en la dirección del voto, entonces, las encuestas como una fotografía nos revelan quién puede ser el ganador en ese momento de un proceso electoral.

En un escenario político, cambiante, incierto, las encuestas miden los cambios en los posicionamientos de los candidatos producidos a gran velocidad, las subidas y bajadas, incomprensibles desde el paradigma de la política del pasado.

Es necesario, una metodología para interpretar estos fenómenos totalmente inéditos en la realidad política. Partimos de la premisa básica, en el Perú no existen instituciones políticas, ni las agrupaciones ni el Estado son instituciones, impera la informalidad, la permeabilidad, las discontinuidad, esta Premisa nos permite comprender los comportamientos cambiantes de los actores en todos sus niveles, el paso fácil de los candidatos y los operadores de una agrupación a otra, sin límites, sin lealtades y sin identificación definida. De existir instituciones sería imposible estos comportamientos..

Esta premisa es necesario tener presente para ver las posibilidades de los candidatos en este proceso 2011. Sobre esta base es necesario ver que los posicionamientos son impulsados fundamentalmente por los operadores políticos, en esta informalidad política, los operadores al cambiar de una agrupación a otra, en grado y número, produce variaciones en los posicionamientos, subidas o bajadas, y si esto se produce a gran velocidad, produciendo aluviones políticos.

Al no haber instituciones políticas los criterios inconscientes marcan estos trasvases como son las Tendencias históricas. Las tendencias no presentan límites formales, sino, son corrientes sociales longitudinales, marcados por el tiempo. Cuando uno o dos candidatos están en una misma tendencia, se produce una competencia por liderar la tendencia. Como el posicionamiento es impulsado por los operadores y a la vez los operadores son impulsados por las tendencias, gana en posicionamiento el candidato que tiene más operadores.  En este proceso del 2011, se han dado dado en el subsuelo social a gran velocidad, al interior de las tendencias, los trasvases de los operadores de un campo a otro, en un momento dado hemos tenido un escenario convulsionado por cinco aluviones políticos.

Los candidatos sin posicionamiento, sin un número adecuado de operadores y sin recursos, por más que representen tendencias, están definitivamente muertos ya antes del proceso eleccionario del 10 de abril.

Bajo estos criterios vamos a analizar las posibilidades de los cinco candidatos que han entrado al escenario generando un fenómeno inédito, nunca antes suscitado en la realidad política.

Las Posibilidades de Luis Castañeda :

La caída de Luis Castañeda,  un candidato que durante dos años ha venido liderando las encuestas, con un posicionamiento elevado, especialmente en Lima, requiere de la metodología expuesta.

Su posicionamiento durante dos años tuvo dos elementos constantes, uno un cuadro de operadores contratados en los Hospitales de Solidaridad, cuya gerencia estuvo en manos de un hombre de confianza de Castañeda. Dos: su labor como alcalde, desde una posición de poder, con un estilo parco y autoritario, lo lleva a liderar la tendencia autoritaria, tecnócrata, pragmática.

Los errores de Castañeda, como de todos los políticos tradicionales, es la soberbia y despreciar a sus aliados, rompe con la alianza Unidad Nacional, y, con ello, pierde la posibilidad de tener miles de operadores que apoyaron la candidatura de Lourdes Flores. En el momento de formar alianzas lo hace con partidos huecos, carentes de operadores, como UPP. El problema se convierte en crítico cuando pierde el control de los hospitales de solidaridad pues así pierde el control de los operadores, y su mayor fortaleza, sus obras, se convierte en su mayor debilidad con el informe dado por Susana Villarán, la corrupción de su gestión queda al desnudo. Aquí se cumple otro principio de la política moderna, cuando una denuncia de actos de corrupción de un político es en tiempo presente destruye su  posicionamiento en forma significativa..

Esta caída en su posicionamiento lo determina como un perdedor, siendo muy difícil poder remontar su caída.

Las posibilidades de Keiko Fujimori:

El caso de Keiko es diferente, su posicionamiento tiene por base la tendencia autoritaria hereda de su padre.

El haber sido el primer aluvión del proceso, con 22% hace tres años, sólo puede explicarse por una tensión constante de operadores al nivel nacional. Keiko ha utilizado el objetivo de la inscripción de un nuevo partido para su candidatura, sin necesitarlo, (el fujimorismo se ha caracterizado por tener partidos descartables, informales, para cada elección) para posicionar su nombre como candidata a la presidencia, del mismo modo ha utilizado miles de paredes a nivel nacional para hacer propaganda a su candidatura y a su nuevo partido, y ha logrado mantener en los sectores populares operadores con colaboraciones económicas dando regalos y promocionando su candidatura.

Keiko es la candidata que ha entrado al proceso tratando de liderar la tendencia autoritaria dando una apariencia de firmeza y eficacia, como una equilibrista manteniendo su posicionamiento, pero sin tener ninguna estrategia de crecimiento. Ha despilfarrado recursos en un ritual de campaña inútil, sin aumentar su número de operadores significativamente, que son los generadores de posicionamiento.

El hecho de mantenerse alrededor del 20 %, en forma constante, puede llevarlo, a una segunda vuelta, sin embargo, es muy difícil que gane, tiene demasiados antis, productos del recuerdo de las corrupciones del gobierno de su padre, que es una barrera infranqueable para el posicionamiento,

Las posibilidades de Pedro Pablo Kuczynski:

El fenómeno PPK, en el último tramo creció significativamente, sin embargo ha llegado a un límite, un error, o una incoherencia ha paralizado el crecimiento de su posicionamiento. Sin embargo, PPK merece ser mencionado como un fenómeno político, aluviónico en la recta final.

Tiene a su favor varios factores, que en el momento oportuno, han potenciado su posicionamiento, en primer lugar esta su capacidad, sin tener partido inscrito, sin ser político, de lograr ser candidato a la presidencia por una alianza de partidos inscritos,  como el PPC, Restauración Nacional, Alianza Para el Progreso, el Partido Humanista, y agrupaciones regionales, por este hecho, tenía la posibilidad de contar con operadores políticos en número suficiente. También su personalidad optimista y de hombre de éxito, ha jugado un rol en su posicionamiento y la coherencia de sus propuestas basadas en datos, información, y en su experiencia. Sin embargo, no es suficiente estos factores para poder crecer y lograr un fenómeno político en el último tramo. Es importante recordar su posicionamiento inicial de 2% a ·3%.

El fenómeno PPK se inicia con una serie de hechos externos favorables, la renuncia de la candidata del APRA, le da posibilidades por tener perfiles similares y estar en la misma tendencia autoritaria. Lo que le ha favorecido es la caída de Castañeda, lo que perdió el candidato de Solidaridad lo gano PPK. Sus operadores disfrazados de cuyes invaden las calles, (creo fue un error táctico este símbolo, hubiera sido más afortunado unir su nombre a su equivalente quechua, cuchiyki, tu cerdo, unido a las finanzas, como el chanchito del ahorro). Cuando parecía incontenible el crecimiento de PPK se paraliza, llega a un límite y es muy difícil que pueda aumentar.

Paraliza el crecimiento del  posicionamiento de PPK  la mentira en tiempo presente, el haber mentido al pueblo peruano con esa misma seriedad con que expone sus propuestas, decir que había iniciado el trámite de la renuncia a la ciudadanía norteamericana y no haberlo hecho le fue fatal. Cuando se descubre la falsedad, se paraliza su posicionamiento, aparece su imagen de lobista, de hombre de negocios sin patria, Ese fue el error de PPK y es tarde para rectificarlo, a partir de ese momento deja de ser confiable, elemento esencial para el posicionamiento.

Las Posibilidades de Alejandro Toledo:

El caso Toledo es un ejemplo de cómo jugar para perder un proceso electoral cuando se tiene todo a favor para ganarlo.

A diferencia de Keiko y Castañeda, Toledo no tuvo operadores para sostener un posicionamiento de tres o dos años, con un partido desactivado, hueco, sin recursos. Toledo viviendo en el extranjero, haciendo visitas esporádicas y declaraciones a los medios de comunicación para mantener la expectativa en su persona, se mantuvo con 5% o 6 % de posicionamiento.

En forma inusitada, aluviónica, en el tramo final del proceso electoral, las encuestas lo ubican en el primer lugar con 36%. Este hecho, como su caída deben ser explicados.

La poderosa tendencia de la identidad sostiene a Toledo, en cierto modo esta tendencia unida a la marea democrática de participación, en la lucha contra la dictadura Fujimorista,  lo hizo presidente. Los operadores políticos que han sostenido el posicionamiento aluviónico de Toledo en el anterior proceso son los mismos que impulsaron el aluvión político con Ollanta. En este proceso del 2011 los operadores volvieron en forma significativa a Toledo, por cálculo político, entre Toledo y Ollanta optaron por el primero, a pesar que ambos no les dan participación. Un trasvase masivo de operadores que vuelven a Toledo explica el fenómeno aluviónico de 36% de posicionamiento de Toledo en el tramo final del 2011.

Por qué Toledo en lugar de crecer decrece en su posicionamiento, al punto de una debacle. La explicación responde a la naturaleza del posicionamiento que no admite incoherencias, en eso Toledo  ha batido un record, además de haber confundido el escenario y a sus oponentes. Todo el proceso Toledo, soberbio, es incoherente hasta con su propia promesa de no responder a las provocaciones, además, se equivocó de escenario, cree ser el luchador del escenario anterior, cuando ya no tiene porque serlo. Ha equivocado a sus oponentes apuntando a Keiko, Castañeda y PPK, como si pudiera a ellos quitarles puntos de su posicionamiento. Fue un error fatal introducir el tema del consumo de las drogas y cuando sus adversarios le retaron a hacerse una prueba de si consumía o no, su respuesta fue tajante y soberbia. EL momento en que Toledo anuncia que se hizo la prueba es un haraquiri político, incoherencia total, no era el momento, he hizo recordar su actitud para hacerse la prueba del ADN para reconocer a su hija.

El problema del aluvión de posicionamiento de Toledo es cuando se detiene, de hecho comienza a destruirse, por ser un fenómeno dado en la mente de los electores, genera vacíos y dudas, las mentes están confundidas, y, cuando esto se refleja en las encuestas, los operadores pierden capacidad de influir, en estas circunstancias se produce a gran velocidad otro trasvase, los operadores vuelven a Ollanta, el camino es conocido.

Toledo no pudo comprender que la única manera de seguir creciendo su posicionamiento era destruyendo el posicionamiento Ollanta. Ese acto implicaba atraer a los operadores de Ollanta y aumentarlos, para ello debía darles participación en las listas congresales y en el aparato del Estado. Soberbios, los dirigentes de Toledo, pedían colaboración incondicional a quienes se acercaban para ser los operadores.

En estos momentos no hay manera de hacer crecer el posicionamiento Toledo, puede pasar a una segunda vuelta, pero, ha perdido liderazgo en la tendencia de la Identidad, se ha convertido en un defensor del orden, eso le puede interesar a sectores minúsculos pero no al pueblo. 

Las Posibilidades de Ollanta:

Ollanta ha sido el menos incoherente, ha sido favorecido por la caída de Toledo, por la paralización de PPK, al recordarnos la importancia del nacionalismo, de la identidad, para gobernar el Perú, puede ganar las elecciones de abril del 2011, y también ganar en la segunda vuelta.

Ollanta, como lo señalé jugó a ser oposición y eso no le dio posicionamiento durante cuatro años, 9%, 10%, 11% o 12 %, menos de la mitad de su posicionamiento del anterior proceso electoral. Entró en el tramo final con ese porcentaje de posicionamiento. ¿Por qué en el tramo final ha subido hasta un 28% y puede en estos últimos días seguir subiendo hasta 30 0 32%.?

Ollanta no sube por los cambios en su apariencia, usa terno, o por tratar de mostrarse católico, o tratar de aparentar lo que no es, son sus incoherencias que le restan. Ollanta sube porque lo sostiene de todos modos la poderosa tendencia de la identidad, en su caso del nacionalismo, y porque en este tramo final deja de ser oposición, se manifiesta positivo en sus propuestas. Sin embargo, esto no es suficiente para comprender su subida aluviónica.

Los otros factores que han llevado a un crecimiento veloz en su posicionamiento a Ollanta son externos. Toledo le ayudo en forma decisiva,  lo caída de Toledo en forma veloz, ha sido la subida veloz de Ollanta. Los operadores que pierde Toledo los gana Ollanta, de este modo, se cumple , en el sentido contrario, pues la única manera de crecer de Ollanta es destruyendo el posicionamiento de Toledo. No fue necesario estas destrucción, Toledo se ha destruido solo, ambos están en la misma tendencia, uno de ellos tiene que liderarlo, en estos momentos lo está haciendo Ollanta. La tendencia de la identidad puede llevarlo a la presidencia.

ARTE: FORMA Y COLOR

 

EROS Y TANATOS